Zanahoria en cubos

Zanahoria en Cubos

Zanahoria en cubos

La deshidratación es uno de los métodos más antiguos utilizados para la conservación de los alimentos y actualmente continúa siendo bastante empleado ya que permite aprovechar las frutas y verduras que se producen en las épocas de cosecha y preservarlos por varios meses sin que pierdan sus propiedades nutricionales.

En esta ocasión hablaremos de la zanahoria deshidratada y de todas las ventajas que su consumo tiene para la salud de las personas, así como de las oportunidades industriales que representa la producción y comercialización de verduras deshidratadas.

La zanahoria es una hortaliza muy apreciada por sus propiedades organolépticas, es decir, por su sabor, color, olor, textura y en general por todas sus características perceptibles por los sentidos del ser humano, así como por su valor nutritivo, particularmente por su alto contenido de beta caroteno, pigmento asimilado por el cuerpo como vitamina A que ofrece muchos beneficios de los que hablaremos más adelante.

Debido a sus propiedades, es un alimento que se recomienda incluir en una dieta balanceada, ya que interviene en los procesos de crecimiento y desarrollo de huesos y en el funcionamiento de los tejidos y para su conservación usualmente se emplea el procedimiento tradicional de deshidratación o secado, el que altera mínimamente las características de la hortaliza y su valor nutritivo.

El método de conservación a partir de la deshidratación de verduras y frutas consiste en reducir el nivel de humedad en el alimento para evitar el desarrollo de los microorganismos responsables de su descomposición, por lo que si se realiza adecuadamente puede garantizar que los alimentos se mantendrán en condiciones aptas para el consumo humano por varios meses, incluso hasta por un año o más.

Esto se debe a que microorganismos como hongos y bacterias, que causan el deterioro natural de los alimentos, requieren de entornos con determinadas condiciones de humedad y temperatura y cuando las frutas o verduras no cuentan con el nivel mínimo de agua que necesitan para proliferar, el proceso de descomposición se detiene.

Gracias a la apertura de nuevos mercados y al aumento de la demanda de alimentos deshidratados, la comercialización de frutas y verduras como la zanahoria deshidratada se ha convertido en una excelente fuente para generar ingresos y aprovechar de mejor manera los cultivos.

Cabe mencionar que la zanahoria tiene muchos usos, como la preparación de productos semielaborados, congelados, deshidratados, sopas, para la coloración natural de algunos productos (gracias a su contenido en beta carotenos) e incluso se emplea como uno de los ingredientes principales en la formulación de complementos nutritivos, por ello que su conservación sea de gran importancia y que se busque aprovechar al máximo los cultivos que se producen año con año de esta hortaliza.

En comparación con otros procedimientos de conservación de alimentos, la deshidratación es una de las mejores opciones pues permite que mantengan la mayor parte de sus nutrientes. Sin embargo, los procesos de secado empleados, que pueden ser industriales o caseros, sí modifican hasta cierto grado el sabor, olor, color, textura y contenido nutricional de los alimentos.

Básicamente por las temperaturas a las que se someten y por la reducción de su nivel de agua. Con el secado, en cierta cantidad se eliminan los productos volátiles de los alimentos, sus carbohidratos pueden hidrolizarse y las proteínas desnaturalizarse, lo que da como resultado pérdidas del contenido de ciertas vitaminas, principalmente la C.

Como ya mencionamos, las zanahorias son ricas en beta carotenos, compuestos que en el hígado se transforman en vitamina A. Esta vitamina es necesaria para el crecimiento y desarrollo de huesos y tejidos, interviene en la regeneración de las células de la piel, uñas, cabello, esmalte de dientes, mucosas y epitelios; contribuye a prevenir enfermedades infecciosas en el sistema respiratorio pues estimula las funciones inmunes como la respuesta de los anticuerpos y promueve la reparación de tejidos infectados.

Tiene ventajas para la visión pues contiene retinol, que mejora la visión nocturna y previene problemas de la vista como glaucoma, cataratas, ceguera crepuscular y pérdida de la visión, además de ayudar a combatir infecciones como la conjuntivitis; tiene un excelente efecto antioxidante, elimina los radicales libres y protege al ADN.

Por otro lado, el beta caroteno es un pigmento que sirve para disminuir los síntomas de asma por ejercicio, prevenir enfermedades del corazón y la degeneración de masa muscular senil; resulta efectivo para el tratamiento de la depresión, el dolor de cabeza, la hipertensión, el reflujo, la epilepsia, el Alzheimer, el Parkinson, la artritis y múltiples trastornos en la piel. Además sirve para tratar la anemia, problemas digestivos y problemas de fertilidad.

La zanahoria seca se puede encontrar en cubos, trozos y en polvo y algunas de las variedades que se cultivan son antares, nandrin, maestro, premia, nene, nelson, carson, pluto, tempe y tino.

Se puede consumir a modo de botana, como ingrediente principal en un platillo, o bien, simplemente como un aditivo nutricional o colorante para mejorar las propiedades nutrimentales de un producto o darle una mejor apariencia.

Como hemos puntualizado, gracias a la gran demanda que existe actualmente de alimentos conservados mediante el proceso de deshidratación, la comercialización de zanahorias y otras verduras secas puede ser un excelente negocio para generar ingresos al tiempo que se reducen las pérdidas de las cosechas de este alimento y permite tenerlo disponible sin importar la temporada del año.

http://www.instantia.com/sobre-la-zanahoria-deshidratada